No cesan los homicidios de líderes sociales en Colombia, pese a los esfuerzos que viene realizando el gobierno del presidente Gustavo Francisco Petro, quien le ha tendido la mano a los grupos armados ilegales del país para lograr la paz total, se siguen reportando crímenes de personas que trabajan por sus comunidades o trabajan en la defensa de los derechos humanos.
Los dos más recientes se reportaron el sábado en el municipio de Puerto Leguízamo (Putumayo), en el sur del país, según la información preliminar que obtuvieron en el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
Las víctimas fueron identificadas como Rigo Alape y Ferney Morales, ambos miembros de la campesina Asociación de Trabajadores Campesinos del Mecaya (Astracam), una filial de la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria (Fensuagro).
Ferney era el presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de la vereda El Diamante, mientras que Rigo formaba parte de la JAC de la vereda Esmeralda. Por el momento, señalaron en Indepaz, no se conocen más detalles del doble homicidio.
La Defensoría del Pueblo ha emitido una alerta temprana en la que advirtió del riesgo para los procesos organizativos comunales agremiados entre ellos Astracam, mientras que también se han identificado situaciones de riesgo para quienes forman parte de la Mesa de Víctimas y de organizaciones campesinas de ese departamento.
A pesar del acercamiento por parte del Gobierno colombiano con algunos grupos armados ilegales la violencia sigue presente en muchos departamentos del país, entre ellos Putumayo, fronterizo con Ecuador y un importante corredor para el narcotráfico, lo que lo convierte en uno de los más golpeados por los enfrentamientos por el control territorial.
También en la misma ONG confirmaron el homicidio del líder social y concejal Carlos Julio Silva Borja en el municipio de Remolino (Magdalena), quien fue ultimado por sicarios cuando retornaba del corregimiento de Corral Viejo al casco urbano de la mencionada población.
Silva Borja se había desempeñado como cabildante tras ser elegido en las elecciones regionales de 2019 por el partido Alianza Social Independiente.
En esa misma fecha también se reportó el asesinato de Edinson Murillo Ararat, quien era un reconocido líder social, miembro de la Guardia Cimarrona y también hacía parte del Concejo Comunitario de Cuenca ubicado en el norte del departamento del Cauca.
El crimen ocurrió en la población de Santander de Quilichao (Cauca), en inmediaciones de la vereda Taminango, en zona rural del municipio. Allí fueron interceptados, junto con su escolta, por dos hombres que abrieron fuego hasta causarles la muerte.
Al otro día, pero en Barrancabermeja (Santander), en el barrio Primero de Mayo, el edil y líder comunitario Milton Andrés Ardila Guiza logró salvar su vida, tras un atentado cuando compraba en un establecimiento del sector.
Según su relato, cuando salió de la tienda donde estaba realizando la compra, un hombre que se movilizaba a pie lo llamó por su nombre y al atender el llamado el sujeto abrió fuego en su contra. En ese momento reaccionó rápidamente y corrió hacia su casa, donde pudo ponerse a salvo.
En lo que va de año, según las cifras de Indepaz, han sido asesinados 140 líderes en Colombia, una cifra que aumenta hasta los 1.367 desde que se firmó el Acuerdo de Paz en 2016.
(Con información de agencias)