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Uno de los remedios para curar el espanto y atraer la salud es colocar limones en agua, un ritual cuyo origen se pierde entre las herencias familiares que nuestras abuelas aprendieron de sus abuelas, pero muy pocos conocen su verdadero significado espiritual.
La creencia popular indica que el simple acto de colocar un limón fresco en un vaso de vidrio con agua y dejarlo en un sitio estratégico de la casa como debajo de la cama o en la mesa de noche, alivia ciertos malestares como el dolor de cabeza. Y están en lo cierto.
El limón es un cítrico conocido en el mundo del esoterismo por sus propiedades protectoras y absorbentes de malas energías, las cuales, se pueden manifestar en nosotros a través de dolores de cuerpo.
Estas pueden tener su origen en personas que nos tienen envidia, hechizos dirigidos hacia nosotros o algún miembro del hogar, o sucesos tristes que hemos vivido y si no realizamos una limpieza energética cuando menos una vez al mes, estas malas vibras pueden estarse acumulando a lo largo de meses o incluso años.
Una de las maneras más rápidas y efectivas de hacerlo es con el remedio de nuestras abuelas: colocar un limón fresco en un vaso con agua. Este procedimiento es realmente sencillo, pero hay ciertas reglas que se deben cumplir para que sea lo más efectivo posible.
Lo primero que hay que hacer es purificar el ambiente, por lo que debemos conseguir un limón fresco, de ser posible, cortarlo nosotros mismos de la rama de un limonero. Los otros materiales a usar son sal y un plato blanco extendido.
Luego hay que partir el cítrico por la mitad, después coloca sal esparcida en el plato y coloca ambos limones boja abajo sobre el plato para que estén en contacto directo con la sal. Pon el plato debajo de tu cama para que absorban todas las malas energías que hay en el ambiente y retíralo a la mañana siguiente.
Cuando hayas realizado ese ritual, llegó el momento de colocar el limón en agua, pero no debe ser cualquier tipo de agua. Los entendidos en el tema indican que debe ser agua bendita o que bendecida.
Con la situación actual de la pandemia es difícil acudir a al recinto religioso más cercano para conseguirla, en estos casos, bastará dejar un vaso con agua en nuestro altar o espacio espiritual (donde tengas tus imágenes religiosas) toda una noche y al día siguiente tu agua estará lista.
Ahora, corta los limones en varios pedazos, coloca agua en un cazo y ponla a hervir por unos minutos. Agrega los limones y deja que se cree una infusión. Cuando repose, apaga el fuego y deja que el vapor se esparza por tu hogar, esto sirve para purificar las energías.
Deja que el agua se enfríe y colócala en una botella que tenga rociador y cada día, esparce un poco de esta infusión en los rincones de tu casa para que se mantenga protegida y libre de energías negativas.
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